
Desde el momento en que nuestra humanidad fue creada,
Nuestro Creador, el “Gran Espíritu”, ha sido el ingeniero y arquitecto de
Todo lo que es y siempre será.
Podemos despedirnos de nuestros sentidos de que somos los Maestros de nuestra alma,
Cuando en realidad somos uno con el “Gran Espíritu”, no hay división, solo una ilusión de que no hay un “Gran Espíritu” o que en última instancia tenemos la opción de estar completamente vacíos de “Gran Espíritu” en la expresión de nuestra alma.
Querido “Gran Espíritu”:
Hoy no hay palabras para expresar cómo nuestra fe en la humanidad se ha visto sacudida esta semana. Desilusionados, heridos, y para algunos el sentimiento de miedo y abandono, acudimos a ti en busca de refugio y paz mental. Sabemos que quieres que estemos “en este mundo”, y “no de este mundo”, pero la naturaleza de nuestro ser, nos sigue atrayendo. Nuestros corazones están abiertos y receptivos a lo que debemos hacer para vadear estas aguas turbulentas y salir adelante. Sabemos lo que quieren para nosotros, sus hijos y este majestuoso mundo al que le dieron vida, y estamos buscando su guía y protección para llevar a cabo lo que han estado soñando y viendo que son nuestras posibilidades.
Ayúdanos a recuperar el aliento y reavivar los elementos que pueden liberarnos, sabiendo que nuestra fe en ti es la respuesta que buscamos. Bendícenos y mantennos cimentados en el conocimiento de que toda esta confusión, odio, caos e injusticia habita en lugares que están vacíos de ti. Abrázanos fuerte en los brazos de tu amor y envuélvenos en saber que nuestra resistencia a lo que no es tuyo nos pone en un reino de belleza, compasión, verdad y liberación. En pocas palabras. Somos uno contigo.
¡Ashé! ¡¡Ashé!! ¿Ashé!! ¡¡¡¡Amén!!!!
Leave a comment